Resident Evil y Silent Hill: Cambiar? o seguir iguales

“Reinventarse o desaparecer”

He escuchado esa frase miles de veces y muchos lo tienen como una filosofía de vida. He visto a cantantes y actores que cada cierto tiempo cambian radicalmente su estilo de vestir, su género musical o aceptar papeles “riesgosos” en películas para que no les pase lo que a otros. Ya estamos llenos de personas como Steve Seagal, Van Damme cuyas carreras se quedaron estancadas.

El intento de "reinventarse" de Steven Seagal

Pero se puede aplicar este principio a los videojuegos?

Resident Evil es una de mis sagas favoritas de todos los tiempos. Desde que la jugué por primera vez quede enganchado y probablemente Resident Evil 2 sea uno de los juegos que más veces me he “pasado” en mi vida… sin embargo, no sé si sabían algo sobre este juego, y es que tras su lanzamiento, y pese a las innumerables críticas positivas que recibió, casi todas tenían el mismo comentario: ”Es muy parecido a su antecesor”.

Y es verdad, Resident Evil, Resident Evil 2, Resident Evil 3: Nemesis y Resident Evil: Code Veronica (y forzando las cosas, hasta Resident Evil Zero) son muy similares. Comparten la misma mecánica, el mismo estilo de juego y, pese a algunos cambios jugables en las mecánicas de cada uno (combinaciones de pólvora y decisiones para enfrentar a Nemesis en la 3, cámaras dinámicas en la Code: Veronica, cambio de personaje y falta de baúles en la Zero) las experiencias son muy, muy similares.

Cambiamos la mansión por una estación de policía y listo!

Esto no es necesariamente algo malo, y de hecho, se puede decir que todas las sagas de videojuegos mantienen sus mecánicas básicas de un juego a otro (sin ir más lejos… miremos a Megaman). La saga Resident se atrevió a hacer experimentos de mecánica con “Spin-Offs”, como la saga “Survivor” (que después evoluciono en los “Chronicles” de Wii) en los que se cambiaba la acción a primera persona, o el Resident Evil Gaiden de Game Boy, un fallido intento de volverse “medio rpg” con un extraño sistema de batallas. Sin embargo, podía la saga Resident Evil quedarse estancada? Eran suficientes los pequeños cambios que habían entre las entregas para sentirse como algo nuevo? O le pasaría lo que a la saga Tomb Raider, que tras cinco entregas casi idénticas decidió “cambiar” sus escenarios exóticos por la ciudad y forzar un sistema de sigilo en un juego que hundió a la franquicia.

Shinji Mikami, el mítico director de la saga se arriesgó y saco un Resident Evil 4 radicalmente diferente a todo lo que se había visto antes. Más enfocado en la acción y cambiando los zombies por seres infectados por un poderoso parásito este se convirtió en uno de los mejores juegos de su generación, logrando enormes ventas y muy buenas críticas. Sin embargo, una nueva y pequeña crítica (que en una saga como esta es una tremenda falla) venía con tantas cosas buenas: ”Este nuevo enfoque de Resident Evil ya no causa tanto miedo”.

La verdad... a mi si me da miedo.

Muchas críticas le llovieron por haber cambiado los zombies, que ya eran icónicos de la saga, por el (interesante) tema del bioterrorismo, sin embargo, estas críticas venían de parte de personas que, igualmente, expresaban haber disfrutado mucho el juego.

Pero la verdadera tormenta llego con el lanzamiento de mi queridísimo Resident Evil 5. Este incluía, por primera vez en la serie (en la serie principal, ojo) la posibilidad de jugar la aventura con un amigo, ya fuera por Internet o a pantalla partida… de resto, se mantenía casi calcada la jugabilidad de Resident Evil 4… por lo que no falto que muchos dijeran que era el mismo juego pero cambiando a Leon por Chris y a España por Africa… y declarando que ahora la saga ya no daba miedo en absoluto.

Más grave fue el caso de la saga Silent Hill. Las dos primeras entregas son unos de los juegos más increíbles a nivel de trama, suspenso y miedo que he podido disfrutar… pero nuevamente, el sistema de ambos es prácticamente el mismo. Recorrer las calles de Silent Hill y entrar a los edificios a los que las pistas nos conduzcan, el universo cambia a una versión más siniestra y buscamos como salir de allí. El cambio a la tercera entrega incluso empeoró, ya que en lugar de expandir este sistema, elimino de un tajo las posibilidades de explorar las calles del pueblo y aunque es un espectáculo visual, creo sinceramente que la serie se estaba estancando… la serie necesitaba un cambio radical…

Yo no sabía lo que pedía…

Silent Hill 4: The Room no podía ser más diferente. No solo ya no podíamos explorar las calles de Silent Hill… YA NI SIQUIERA VISITABAMOS SILENT HILL! Es un muy buen juego y con él que pase miedo, mucho miedo, pero no se sentía como un Silent Hill para nada… lo que me llevo a abandonar la serie hasta que me encontré con el maravilloso Silent Hill: Shattered Memories (del que ya hablé suficiente) que nuevamente ofrecía un enfoque totalmente distinto, eliminando por completo el combate del juego… sin embargo, los primeros videos de Silent Hill: Book of Shadows para PSVita lo muestran enfocado en el multiplayer y en la acción, terminando de eliminar todo lo que había hecho grande a la saga.

Sí, todos echamos en lástima que la saga haya cambiado, pero también reconozco que yo fui el primero en desear que lo hiciera. Como manejamos esta situación? Ya se había mencionado que cuando una serie toma el riesgo de cambiar sus mecánicas y estilo, está corriendo un gran riesgo, pero mantener el mismo por mucho tiempo puede parecer no serlo, después de todo, los Megaman, los Call of Duty y los Grand Theft Auto (desde la III) son, a pesar de las novedades, gimmicks y cambios de escenarios, básicamente los mismos juegos, y siguen teniendo tremendo éxito.

Así, a primera vista... cual Call of Duty es este?

Puede que Resident Evil 4 y Resident Evil 5 hayan sido éxitos de ventas y que les fuera muy bien con la crítica… pero cualquiera que visite foros de discusión sobre el juego, o que mire los comentarios de los fans en casi cualquier sitio de Internet que lo mencione, verán como todos quieren… no, EXIGEN, que la franquicia vuelva a sus inicios, que vuelva a asustar, que vuelvan los zombies… en fin. Capcom más o menos ha dado gusto. Un DLC para Resident Evil 5 que recuperaba el ambiente del primer juego de la saga (y que incluso incluía la posibilidad de jugarlo con el viejo estilo de cámaras), se ve que el nuevo Resident Evil Revelations (la razón por la que posiblemente termine comprando un Nintendo 3DS) está más enfocado en la exploración y el miedo a pesar de mantener la cámara a la espalda del protagonista como en las últimas dos entregas. También ha prometido que el próximo Resident Evil 6 ”regresara los orígenes de la saga”.

Viendo esto, nunca entendí tanta crítica hacia Resident Evil 5 por “Parecerse demasiado a la cuarta parte” por parte de aquellos que idolatran las entregas de PSX. Recordemos que RE2 y 3 son también muy parecidos a su antecesora (cambiemos la mansión por una estación de policía y ya está).

Konami también menciono que Silent Hill Downpour será “horror psicológico” como la segunda entrega, sin embargo, los videos e imágenes que se han visto indican lo contrario. Ojala me equivoque y al ver el juego completado vea que es cierto.

mmmm… veo que va siendo hora de terminar este artículo y escribir una conclusión al respecto… pero la verdad, no tengo ninguna. Yo estoy a favor del cambio, me gusta ver que mis sagas favoritas se arriesguen con nuevos estilos de juego y que nos sorprendan a los videojugadores. Hace un tiempo escribí un artículo sobre Tomb Raider y como los cambios radicales que ha tenido rescataran la franquicia del “olvido” en que estaba, y fue el primero en aplaudir a Resident Evil 4 cuando se mostró (y soy un enorme fan de la 5… aunque tampoco quiero que la saga se quede en este nuevo estilo para siempre). Sin embargo, soy de los que quiero que Silent Hill vuelva a ser lo que era, que no quiere ver que Megaman abandone su camino 2-D y que quiere que sigan saliendo Call of Duty año tras año en los que no se haga más que disparar (quieren probar algo diferente en los FPS de bala? Prueben Bulletstorm).

Así somos de complicados, queremos que las cosas cambien, siempre y cuando sigan igual.