Uno de los temas más “candentes” que hay actualmente en la comunidad gamer es si los videojuegos pueden o no manejar temas “serios”. Es verdad que la mayoría de ocasiones en que este medio ha tratado de tocar temas como el abuso sexual, la drogadicción, la violencia intrafamiliar, el síndrome de estrés post-traumático, la trata de personas, etc. termina haciéndolo de una manera tan superficial que en ocasiones resulta penoso y hasta ofensivo con las personas que sufren de ellos en la realidad y esto ha llevado tanto a una fuerte crítica social contra el medio y a que muchos desarrolladores prefieran evitar estos temas para no verse enredados en controversias.
Tristemente, una buena parte de la comunidad prefiere no tomar partido de esta discusión, alegando que los videojuegos simplemente tienen que ser divertidos y que que la política y las opiniones se deban mantener alejadas de ellos. Pero yo soy de los que cree que los videojuegos, al igual que la literatura o el cine (o la televisión o los comics) es capaz manejar temáticas complejas correctamente y ya esta comprobado gracias a obras como Spec-Ops: The Line, This War of Mine, Depression Quest o Bioshock. Incluso el tema del abuso sexual, sobre el cual se ha generado un fuerte debate respecto al tratamiento que se le da en la cultura popular, puede ser abordado seriamente por un videojuego. Estoy hablando de Enola, un juego desarrollado por un pequeño estudio de El Salavador llamado The Domaginarium.
Es tristemente común que cuando el tema de la violación se use en una película, serie, etc. suele tener como objetivo simplemente impactar a la audiencia. Esta simplificación se suma a la existencia de una cultura de la violación en nuestra sociedad para convertir a las víctimas de tan horribles actos en culpables de lo ocurrido o en personas mentirosas. Afortunadamente Enola no es uno de estos casos, pues es uno que realmente explora el horror del abuso sexual y las consecuencias psicológicas de este, no solo en la víctima, sino de las personas que la aman.
En este juego controlamos a Enola Fountaine, una joven que llega a su casa y se da cuenta que Angélica, su pareja, está extraviada. En ese momento todo cambia para convertirse en un mundo de pesadilla y a nuestra protagonista no le queda más remedio que adentrarse en él para encontrar a su amada y descubrir su pasado. El tono, temática y aspecto visual del juego recordará a muchos a la saga Silent Hill, sobre todo a los episodios 2 y 4 (por lo menos a mi) ya que estos son los que más se interesan en explorar psicológicamente a los personajes. En la piel de Enola debemos recorrer escenarios como una misteriosa isla, una cabaña, una iglesia y un bar “para caballeros” en los que nos enteramos de la historia de Angélica, de los tres hombres que destruyeron su vida y de una misteriosa mujer obsesionada con protegerla mientras exploramos, resolvemos puzzles y huimos de una misteriosa figura oscura.
El juego esta lleno de imágenes perturbadoras y de y momentos crueles, incluso hubo un momento en que me sentí tentado a quitar el volumen para no escuchar a un hombre narrar burlonamente la forma en que había torturado a una chica, pero ninguno de estos elementos está aquí gratuitamente o por crear controversia, pues mediante ellos se nos está contando una historia sobre lo que ocurre en la mente de una persona que ha sufrido una violación y en la de aquella persona que la ama y se entera de lo que ha ocurrido, situaciones en las que no queremos estar, pero en las que para bien o para mal, este juego nos hace pensar.
El juego también nos hace pensar en la forma en la que reaccionamos antes estos horribles eventos y en cómo enfocamos nuestra rabia y frustración. Durante el juego, especialmente en su parte final, encontraremos a algunas personas cuyos crímenes y pecados conoceremos y tendremos la posibilidad de perdonarlos o castigarlos en trampas dignas de la saga Saw... pero, ¿vale la pena castigarlos? ¿nos hará esto sentir mejor con nosotros mismos? después de todo, sin importar lo que hagamos, no podemos cambiar el pasado de nuestra amada, pero sí su futuro, ya que dependiendo de nuestras acciones podemos ver diferentes finales en los cuales podemos ver ya sea una luz de esperanza en el futuro de estas dos mujeres gracias al amor entre ellas pese a todo lo que ha pasado o podemos sumergir sus vidas en una oscuridad aún mayor.
Queda claro que Enola es muy interesante a nivel temático y visual (y auditivo), pero qué tal se juega? Las comparaciones obvias serían con Gone Home o Dear Esther, juegos que son mal llamados walking simulators, con los que tienen en común su enfoque en la historia y en recorrer los escenarios, pero el juego de The Domaginarium tiene su buena cantidad de puzzles que mezclados con los breves enfrentamientos con el “hombre oscuro”, su macabra ambientación y los laberínticos escenarios lo convierten en un verdadero survival horror en primera persona. Debo decir que lo que mas disfruté de este juego fue recorrer sus escenarios, explorar para descubrir mas sobre la historia o analizar el simbolismo de sus imágenes.
Pero algunos de estos elementos no estan tan bien integrados a pesar de todo; aunque los enfrentamientos cumplen su trabajo de agregar algo de sorpresa y tensión al recorrido de los escenarios, estos no son más que cortas y sencillas secuencias de machacabotones que realmente no aportan demasiado al juego y muchos de los puzzles son retos matemáticos que pueden resultar fácilmente frustrantes y la distribución de los puntos de grabado es bastante extraña. También tiene problemas comunes de los juegos independientes creados en Unity, como algunos objetos decorativos algo genéricos, animaciones cortadas, una calidad gráfica a la que le falta pulirse un poco y unos cuantos glitches. Afortunadamente nada de esto resulta demasiado grave y no arruina el disfrute de la historia (excepto esos malditos puzzles y laberintos, fuck them).
Puedo comprender que a muchos jugadores no les llame la atención juegos de este tipo, pero se estarían perdiendo de una historia muy interesante y a uno de los pocos juegos lo suficientemente valientes como para arriesgarse a explorar temas tan fuertes y complicados sin volverlos sensacionalistas (ademas de ser el único que se me viene a la mente en que controlamos a una mujer homosexual), ademas, hay que apoyar a la pequeña industria latinoamericana de videojuegos así que se los recomiendo muchísimo.
Análisis basado en una copia del juego en Steam otorgada por el desarrollador del juego
Pueden comprar Enola en
- Gamersgate: http://www.gamersgate.com/DD-ENOLA/enola
2 comentarios:
Estuvo bueno el artículo, y me ha inspirado hacer un laberinto incluso peor para el siguiente juego :D
Pero en estos momentos para desasustarme de Enola estoy con un juego sci-fi de un "demonio irracional" estilo Shub Niggurath. Eso va a estar bastante más light que una historia de una niña de 15 años que violan :-/
Aunque sí quiero que hagamos todos los demás spin-offs de Enola, cuando acabemos este v_v
Esto resulta interesante y la verdad es que preferiría que el tema se tocara con menos frecuencia, no porque no me guste que lo toquen, sino porque son pocos los que pueden tratarlo de la manera correcta
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