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viernes, 17 de mayo de 2013

El problema con El Mandarín

ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE IRON MAN 3
y despues no digan que no le avisamos

No iba a escribir este artículo, pensé que ya todo el mundo había dejado de hablar de Iron-Man 3, ya voces más expertas se pronunciaron sobre el tema, a veces con argumentos similares a los míos y, honestamente, pensé que ya no importaba... pero me equivoqué, la gente se sigue quejando respecto al giro en la trama respecto al Mandarín en esa película, tanto que (inevitablemente, debería decir) Hitler también se está quejando sobre ello:


Antes que nada, recordemos que en los comics, y como ya les comenté en un artículo anterior, El Mandarín es un descendiente de una acaudalada familia China, ahora en la ruina, que encuentra accidentalmente los restos de una nave espacial del planeta Maklon IV y de su piloto, un alienígena con forma de dragón. Allí aprende a controlar esta tecnología extraterrestre y especialmente, los 10 anillos que formaban parte del sistema de energía de la nave, lo que le dió un inmenso poder, el cual sumado a su conocimiento de las artes místicas Chinas, artes marciales y magia, usaría para, como todo villano, tratar de conquistar el mundo.


Claro que, desde el primer trailer de Iron Man 3, quedaba claro que este personaje había sido reimaginado para la película. Aunque películas como Thor y The Avengers habían abierto campo para la magia y la existencia de extraterrestres dentro del universo fílmico de Marvel, quedaba claro que el Mandarín no se iba a parecer al de los comics, y aunque si portaba 10 anillos, su apariencia resultaba una mezcla extraña de la cultura china y la del Islamismo de medio oriente, adecuada para su papel de líder de una secta terrorista (e interpretado por Ben Kingsley, actor que Hollywood siempre usa para representar a alguien de “País de Asia central no especificado”, pero que Chino, ciertamente NO es ni parece). No oí ni leí ninguna queja al respecto, aparentemente los fans estaban tan emocionados por ver al Mandarín en la pantalla grande que no se dieron cuenta que este no tenía nada que ver con el que conocían de los comics.


Por eso me asombra que, tras ver la película, ha surgido un ejército de “fans indignados” porque el Mandarín, en realidad, no existiera. Verán, por si no han visto la película (y aún así están leyendo esto!? vayan a verla! que esperan? es MUY buena!), allí resulta que “El Mandarín” es en realidad un actor contratado por el verdadero villano de la película con el objetivo de crear una guerra que beneficie su nuevo negocio de creación de super-soldados. Aunque eventualmente este mismo verdadero villano resulta portar dos tatuajes de dragón y llamarse a si mismo “Mandarín”, la realidad es que el personaje como tal, no existe.

A mi, personalmente, me encantó este giro en los acontecimientos; No sólo me pareció entretenido por la forma en que se desarrollaba, sino que encaja perfectamente en el mundo que se ha creado alrededor de Tony Starks y Los Vengadores. La historia de las dos anteriores Iron Man y del comic en el que esta se ha basado (Extremis, que les presente aquí mismo) involucra temas de terrorismo, contratación militar y desarrollo de armamento, y aunque no es la primera vez que vemos a un malvado crear un conflicto falso para su beneficio económico (se me viene incluso una película de James Bond a la mente), es la evolución lógica de todo lo visto hasta ahora, y que se resume en la frase “ Desde que el chico grande con el martillo cayó del cielo, la sutileza se extinguió“ y tiene razón, si quería llamar la atención en un mundo post-invasión extraterrestre en Nueva York, el enemigo que estaba creando tenía que ser exagerado, y eso es el Mandarín, una exageración de todos los temores de América: un terrorista al que no pueden encontrar, que les golpea en su centro sin dejar rastro, que no saben de donde viene, que representa el terrorismo islámico, la amenaza china, los ciber-ataques y las paranoias racistas occidentales, algo que un artista marcial inmortal con anillos de poder no necesariamente podía lograr.


No estoy diciendo que el Mandarín, con sus temas de magia y extraterrestres, no hubiera funcionado en la película, podría haber salido muy bien, pero la película resultante esta muy bien sin necesidad de ello; Es la mejor de la trilogía y me atrevería a decir que la mejor de Marvel después de The Avengers, con un equilibrio perfecto entre suspenso, acción (la batalla final se me hizo ÉPICA) y comedia, comedia a la que por cierto el personaje de Trevor Slattery, el “falso mandarín”, aporta muchísimo. Por qué molesta tanto? no es el único universo en que el Mandarín no existe. En los comic "Ultimate" este personaje es creado por el mismo Tony Stark como el villano de la serie de caricaturas de Iron-Man creadas para promocionarse el mismo!


Con esto dicho podemos pasar a discutir lo importante, esta chica jodidamente sexy se llama Ellen Brandt, y tiene una cicatriz en el rostro... eso significa que Man-Thing es parte de este universo también?

si no son frikis de los comics de Marvel, no se molesten en tratar de entender lo que acabo de decir.

lunes, 13 de mayo de 2013

El placer de explorar (en los videojuegos)

Tras varios meses de recorrer incansablemente los mares en mi confiable barco rojo parlante, acabe con Ganondorf y terminé The Legend of Zelda: Wind Waker, el cuál es uno de los mejores y más bellos juegos que he disfrutado en toda mi vida, y en mi opinión, el mejor “Zelda” de todos. La razón de que me gustara tanto no radica tanto en su jugabilidad (que es muy buena), ni en sus gráficos (que son hermosos), su música (una obra de arte) o su historia ( es... buena, si) sino por la libertad que me dió para explorar su enorme mundo.


La primera vez que navegamos los mares de este mundo inundado a bordo del “Rey de los leones rojos” estamos abrumados ante todas la posibilidades; Tantas islas, cada una con sus misterios, todos los secretos que oculta ese enorme océano y que queremos descubrir, así Nuestro viaje se ve interrumpido constantemente por la curiosidad, será que si me desvió hacia esa isla podré obtener allí algún tesoro? que protegen esos barcos? y tratar de descubrir cada una de estas cosas es una delicia. Un momento álgido para mi se produjo cuando encontré una pequeñísima isla con esta estatua, y no podía esperar para averiguar su significado, otro cuando en un viaje nocturno me encontré con un barco fantasma que desapareció cuando me le acerqué.


Wind Waker me ayudó a confirmar algo que sospechaba hace mucho tiempo, que EXPLORAR es lo que más disfruto de un videojuego y amo cuando estos me permiten hacerlo a gusto, o no solo me lo permiten, sino que me animan a hacerlo: los personajes hablan sobre los tesoros que oculta el mapa, las rutas lo obligan a uno a pasar por lugares intrigantes y a cada instante se encuentran mapas de tesoros que apuntan a lugares apartados y tal vez desconocidos. Descubrir finalmente estas cosas, que en este juego pueden ser piezas de corazón, rupias, nuevos mapas o hasta items y armas nuevas, es tremendamente satisfactorio y útil, sin embargo, también aprendí que disfruto más de un tipo más diferente de recompensas por explorar en un videojuego.

Cambiemos un momento de juego, vamos a Red Dead Redemption. Hay un lugar en el mapa llamado “Aurora Basin”, es un poco inaccesible, está lejos de cualquier otro lugar en el mapa en el que hayan “cosas para hacer”... y sin embargo llegar allí por primera vez fue una de las experiencias más hermosas que tuve con ese juego, cuando encontré una pequeña cascada en un bello escenario invernal, la cascada de la que nace uno de los ríos principales del mapa, tal vista me llenó de alegría y se siente enormemente recompensado de haber realizado la travesía virtual. Los resultados de mi exploración en este juego pudo no haberme dado grandes beneficios en forma de items, dinero o extras (aunque a veces los hay) pero si me permitió deleitarme con la hermosura de las increíbles localizaciones creadas por los desarrolladores de Rockstar, y me sentí igualmente feliz.


Pero cuándo los resultados de la exploración nos llevan además a conocer más sobre el mundo de este videojuego, su historia o su mitología, es cuando más siento que ha valido la pena, y esto no necesariamente ocurre sólo en juegos con mundos abiertos como los Zelda o Red Dead Redemption, ya que incluso juegos con niveles más lineales como el primer Bioshock o el nuevo Tomb Raider nos dan a conocer sus misterios sólo si recorremos a conciencia todo sus rincones. Ambas obras tienen mapas independientes en lugar de un enorme mundo abierto como los que mencionaba anteriormente, pero estos lugares llenos de secretos y vistas impresionantes. En ambos juegos es posible encontrar documentos y lugares que nos cuentan (o mejor aún, nos muestran, sin expresarlo con palabras) la historia de aquellos que han estado en Rapture y Yamatai antes que nosotros.

Incluso existen juegos que, se puede decir, son exclusivamente de exploración; el maravilloso Shadow of the Colossus se me viene a la mente, donde desde el principio solo se nos da un caballo, un mapa enorme y un rayo de luz, y con esto debemos cruzar enormes llanuras, desiertos, bosques, playas y cuevas para encontrar a cada uno de los enemigos y acabar con ellos. Además, ese mismo mundo, que a veces nos lleva a estructuras destruidas, ciudades abandonadas y templos misteriosos, nos da ideas sobre su historia, sin decir una sola palabra.


Estoy dando ejemplos muy recientes, cierto? sin embargo mi juventud se me fue recorriendo milimetro por milimetro en los Final Fantasy de SNES y PlayStation en Barcos voladores y naves buscando... buscando que? aventura, supongo (y Chocobos, invocaciones, armas, etc). No habían momentos videojueguiles más felices para mi que cuando por fin me ponían en control del barco volador o nave (llámese Highwind, BlackJack, Ragnarok o Lunar Whale) y saber que ahora ya podía poner mis pies virtuales en todos los rincones de los mapas que SquareSoft (sniff... SquareSoft) había preparado para mi. Ver por primera vez en el medio del mar un edificio en que me esperaban dos Guardian Forces en FFVIII, o encontrar un a cueva secreta en la luna en FFIV, sin que nadie me dijera donde estaban fueron dos grandes momentos de felicidad que ya no pude volver a disfrutar en la saga desde que Final Fantasy X abandonó el mapa abierto tan común en estos juegos.


Cuando descubro cosas en juegos así, sobre todo elementos opcionales, que no todos aquellos que los juegan los descubrirán, me siento como una especie de arqueólogo, emocionado al encontrar algo nuevo. Espero no ser el único que se siente así al respecto, ya que es una de las principales razones por las que amo los videojuegos.

lunes, 6 de mayo de 2013

Bioshock Infinite: Extremismo blanco protestante anglosajón

A estas alturas de la vida, ya todos los que jugaron Bioshock saben que la ciudad Rapture esta creada en base a la filosofía objetivista de Ayn Rand y que en el juego existen muchas referencias a ello (incluso yo escribí un artículo al respecto). Gracias a esto, la obra de Irrational Games gozó de un trasfondo muy profundo e interesante que ayudó a convertirlo en un clásico moderno.

En Bioshock Infinite, la tercera entrega de la saga, La oscura y destruida ciudad submarina es cambiada por la radiante, colorida y abrumadora Columbia, una ciudad voladora, y al igual que la importancia que tuvo Rapture en el primer juego (realmente es la protagonista del juego), esta ciudad aérea y las políticas detrás de ella tienen un papel estelar en la trama (aunque no necesariamente el principal). Para empezar, Columbia es llamada así en honor a la “Personificación femenina de los Estados Unidos” (algo así como el Tio Sam, pero en mujer), una imagen que se usó mucho en la primera mitad del siglo pasado, y no pasa mucho tiempo antes que nos demos cuenta que dicha urbe flotante vive en base a una religión que es mezcla de Cristianismo con una adoración a los padres fundadores de los Estados Unidos y con una interpretación de la Biblia y la constitución que les permite creer en una versión extrema del “excepcionalismo americano”.


Según la ideología de Columbia, Estados Unidos es era un país diferente a los demás, que por su superioridad moral cuenta con la misión encomendada por Dios de ser faro y guía para el resto del mundo (también creen que el país ha traicionado esta creencia, por lo que ellos se separaron de la unión y se consideran herederos de su destino). Basados en estos mismos pensamientos, creen en la “superioridad racial”, por lo que desprecian a los negros, asiáticos, latinos y hasta a los Irlandeses. Todos los habitantes “no-blancos” de la ciudad están relegados a la servidumbre y forzados a vivir en “los bajos” de la ciudad, lejos de la belleza de la ciudad voladora, lo que ha ocasionado el surgimiento de movimientos insurgentes que amenazan la paz.


Les suena familiar todo esto? es porque esas ideologías aún están presentes en la USA moderna y cada día se hacen más fuertes y con más presencia en los medios. Originalmente, el “excepcionalismo americano” creía que el país no era superior, sino diferente a los demás debido a sus propias características históricas e ideológicas, eventualmente las ideas fueron mutando y llegaron a justificar el “Destino Manifiesto”, que sirvió de excusa divina para la expansión de América, y eventualmente, para justificar su interferencia en política exterior por su deber de promulgar “la libertad y democracia en el mundo”.

La existencia de movimientos políticos gringos como el Tea Party sirvió de sutil inspiración a Kev Levine para crear a Columbia, es más, la existencia de una Columbia “real” no esta lejos de la realidad.

No, no me refiero a una ciudad cuántica flotante (ojalá), sino a un fortín ultra-conservador para esas personas que creen que la administración de Barack Obama está convirtiendo a su querida nación en un fortín socialista arrodillado frente a las demás naciones que pretende destruir la libertad de sus habitantes arrebatándoles las armas de fuego, forzándoles a aceptar un seguro de salud, obligando a las mujeres a abortar y permitiendo que los homosexuales anden sin control por las calles... ajá... (si creen que estoy exagerando sobre las creencias de estas personas, pongan Fox News por media hora y alguien dirá estas mismas palabras, exactamente, creyendolas con terrible seguridad).






La creación de esta lugar es un proyecto iniciado por un grupo de “Patriotas” que buscan ejercer su libertad ”Tal como la imaginaron los padres fundadores” y para protegerse de catástrofes como “un posible colapso económico del país”. Aunque aclaran que no se discriminará a nadie racialmente, si deja muy claro que ”los liberales y comunistas van a encontrar que la vida en esa comunidad es incompatible con su ideología y estilo de vida”, y sobre la religión de sus posibles habitantes son ambiguos al declarar que sus ideales no tienen nada que ver con religión, pero que “Se limitara el número de lugares de culto dentro de los muros de la ciudad” (esto me suena a que probablemente no vayan a dejar construir una mezquita). Además, en enfoque en la libertad de usar armas de fuego es impresionante. No solo van a construir en Idaho, uno de los estados con mayor permisividad para el porte, sino que literalmente el centro del lugar es un museo de armas de fuego y además tendrá una fabrica de armas de fuego. Oh dios.


Experimentos como este no son únicos en el mundo. No es inusual que grupos de cierta mentalidad, etnia o religión se agrupen en barrios o incluso ciudades, pero sí lo es que pretendan cerrar estas con muros y torres de defensa. Además, estas “comunidades religiosas” en los Estados Unidos han terminado muy mal en ocasiones, como ese barrio católico creado por el fundador de Domino’s Pizza en Miami que comenzó a matonear a aquellos que disintieran. Me pregunto cuánto tardará esta ciudad en salir volando si algún día se logran poner restricciones al porte de armas de fuego. Solo esperemos que no logren conseguirse a algún científico especializado en física cuántica.


En Bioshock Infinite es difícil clasificar a los seguidores de Comstock. Mientras algunos de los que conocemos son verdaderos fanáticos religiosos que le siguen ciegamente, otros como Fink, o inicialmente Rosalind, no están nada interesados en temas espirituales y le acompañan por los beneficios económicos, mientras que la mayoría de habitantes de Columbia muestran una hipocresía increíble ya que mientras declaran seguir las enseñanzas de profeta, una chica habla sin preocupación sobre cómo va a tener que abortar para que sus padres no se enojen con ella por quedar en embarazo, otro grupo de chicos alardean sobre quién es más promiscuo y una mujer se muestra horrorizada porque un hombre asiático se le acercó y le habló “como si fuera igual a ella”. Estas actitudes no difieren mucho de lo que se ve día a día, no hace mucho vi en Fox News una comentarista que se horrorizaba ante cualquier intento del gobierno de regular la venta de armas de fuego, calificándolo de un ataque contra la constitución, y pocos minutos después, la misma persona, hablando sobre la esposa de uno de los culpables de la bomba de la maratón en Boston, decía que así no supiera nada sobre lo que hizo su marido, debería estar en la cárcel solo porque usaba una hijab (velo islámico), aparentemente ignorante de que la misma constitución que tanto quiere también asegura la libertad de culto.



Si, hay gente así, y no solo en Estados Unidos, sino en todo el mundo. Gente que usa una ideología, una religión, una constitución, incluso una raza, para pasar por encima de los demás, para justificar los actos más terribles, Pero este videojuego no esta diciendo que el Cristianismo sea malo, o que el Nacionalismo lo sea, pues verán, a pesar de la prevalencia de estos elementos al comienzo del juego, el centro temático de este son las elecciones que tomamos los seres humanos, un tema que es aprovechado al máximo gracias a que va de la mano con el tratamiento que le da a la física cuántica y la existencia de otros mundos... pero ese es material para otro artículo.

Saben que, mejor olviden todo esto y disfruten el juego, no me gustó tanto como el primer Bioshock, pero es una maravilla.

sábado, 4 de mayo de 2013

Día de Star Wars: Shadows of The Empire.

Sigo insistiendo, crear el día de Star Wars basados simplemente en una fecha homofona a una frase de las películas me parece un poco tonto (aunque hablamos de una saga de fantasía espacial con espadas de luz y perros inteligentes de dos metros) y creo que el 25 de Mayo, fecha del estreno de la primer Star Wars en 1977, sería mas apropiada, pero como yo no hago las reglas, celebremos esta vaina hoy.

El año pasado compartí con ustedes los comics y novelas de la saga "Heredero del Imperio" para celebrar este día, hoy vamos a hacer algo parecido con el proyecto multimedia que fue Sombras del Imperio.


En 1996, Lucas Film tuvo la idea de crear una "Intercuela" de Star Wars (esa palabra existe) que se desarrollara entre "The Empire Strikes Back" y "The Return of The Jedi" para preparar el camino de la reedición de la trilogía en cine que vendría un año despues y la trilogía de precuelas que vendria tres años despues. El proyecto iba a explorar todo el comercio de una película... sin hacer la película. El resultado fue Shadows of The Empire, una de las partes de la mitología de Star Wars mas querida por los fans.

Esta saga nos cuenta de los intentos de Leia por recuperar el cuerpo de Han Solo, encerrado en carbonita, de las manos de Boba Fett antes que pueda entregarlo a Jabba, mientras Darth Vader continua la busqueda de Luke Skywalker. Pero un nueva fuerza entra el el juego, la organización criminal Black Sun, liderada por el macabro "Principe Xizor" que entra en colaboración con el imperio para dar caza a los rebeldes.


 Lo interesante de este proyecto, es que la historia esta practicamente partida en tres, la novela, escrita por Steve Perry, cuenta la trama principal, los comics se enfocan en Boba Fett y sus enfrentamientos con todas las fuerzas que le quieren arrebatar el cuerpo de Solo, como los Rebeldes u otros cazarrecompensas, y en Jix, un ayudante de Vader en la busqueda de Luke y por último el videojuego, que se lanzó para la consola Nintendo 64, nos permite vivir las aventuras de Dash Rendar, un cazarrecompensas al estilo de Han Solo que se ha unido a los rebeldes.


Aunque cada una de estas obras puede ser disfrutada por si sola, solo aquellos que disfruten de los tres tendran la visión completa de la historia. Por ejemplo, el destino de Rendar parece ser uno en los comics, pero a menos que juguemos el videojuego no sabremos que pasó con el realmente.

Esta saga tuvo un impacto tremendo en el canon Starwarsiano, la organización Black Sun continua apareciendo hoy en día en el universo expandido y varios personajes, como Guri, la asistente de Xizor, continuarían teniendo relevancia en secuelas. Pero la cosa no paró ahí, Kenner creó varias figuras de acción de los personajes de esta historia, y Micro-Machines creó toda una línea de los vehiculos, tambien existe toda una línea de Shadows of The Empire en el juego de cartas coleccionables.



Quieren disfrutar de esta saga? Aqui pueden descargarla:







(desde Emuparadise)